domingo, 4 de octubre de 2009

Malditos Bastardos (Inglourious Basterds)



Lo primero presentarme como Dios manda, ya que he tenido una semana liada y hasta ahora no he podido hacerlo, así que a partir de ahora espero escribir regularmente cuando mi agenda me lo permita. Me declaro un gran admirador de todo tipo de películas, sin excluir géneros que me apasionan como la ciencia-ficción o el terror. Y, sin mas preambulos, voy a empezar con una de las películas de la temporada, tanto de crítica como de público.

Hablar del cine de Tarantino significa hablar de un cine único y personal. A pesar de que muchas de las mejores ideas de sus películas son reciclados mejorados de otras películas, es capaz de enlazarlos de manera magistral, superando muchas veces a sus maestros. Por lo tanto, ya nadie pone en duda la calidad del director de Tennessee que tras siete películas parece encontrarse en el mejor momento, o por lo menos, en el que puede hacer lo que le de la real gana. Aún así, reconozco que tenia algunas dudas respecto a su nueva incursión cinematográfica. No tengo absolutamente nada que reprochar a sus cinco primeras películas, sobre todo a su díptico "Kill Bill" (al que las palabras obra maestra no le quedaría demasiado grande), la incursión en ese proyecto llamado Grindhouse, inspirado en las dobles sesiones que se hacían antiguamente en los cines de barrio americanos, fue mas bien aburrida e insípida. Si bien "Planet Terror" de Robert Rodríguez (la mitad de Grindhouse), si que captaba a la perfección lo que se pretendía, "Death Proof" era claramente un gran declive de sus virtudes. Soporífera, diálogos aburridos y personajes patéticos inundaban el alargado metraje que pudimos ver en español. Con estas premisas me acerque a ver "Inglourious Basterds", primera película con titulo estúpidamente traducido al español de Tarantino (Basterd significa Cabrón y no Bastardo). No diré que no tenía ganas de verla (las tenía, y muchas), pero también cierto respeto y un poco de miedo. Menos mal que mis temores fueron despachados rápidamente.

"Inglourious Basterds" es violenta, es divertida, es angustiosa, es salvaje... pero por encima de todo, es valiente e inteligente. Algo que no todo el mundo sabrá apreciar, tal vez dejándose cegar por la vena mas desenfrenada de la película, pero los cinco capítulos en los que esta dividida están realizados e unidos de manera magistral. Cada uno es una pequeña película en si mismo y contribuyen a avanzar la trama. Algunos nos preguntamos como se adaptaría Tarantino al genero bélico, si perdería su esencia. Obviamente no ha sido así, es 100% Tarantino. De hecho, esta mucho mas cerca de Kill Bill o de Pulp Fiction que de Salvar al soldado Ryan, por ejemplo. Cierto que tiene cosas criticables, como por ejemplo estaría bien una mayor participación de los bastardos, pero la película es la que es, y es estupenda.

También se recuperan los personajes magníficos en esta película. Si en su anterior lo único que terminabas sintiendo de ellos era irritación, en esta son todos magníficos. Malos, buenos, nazis, bastardos, mujeres, hombre... el universo es tan variado y tan rico que casi es imposible quedarse con uno, pero es que brilla con increíble luz propia el teniente Hans Landa (impresionante el desconocido Christoph Waltz). Es a la vez divertido y aterrador, y también muy humano. No me extrañaría que le llovieran los premios, solo por la primera escena se lo merece. También destacan Brad Pitt, mucho mejor en papeles gamberros como el que aquí tiene, Diane Kruger, que por fin demuestra que es buena actriz, algo que había hecho en contadas ocasiones, y Til Schweiger, que aunque sale poco, esta estupendo y muy divertido.

Por lo demás, técnicamente muy buena, genial montaje y fotografía, la música, si bien no tan inspirada como en Kill Bill (dudo que algún día Tarantino sea capaz de superarse con esa elección de canciones), cumple perfectamente con lo que es la película. Así que en general, hay muy poco que objetar a la película. ¿Qué deja algunos cabos sueltos? cierto, pero no importa nada, no viene mal pensar de vez en cuando, ¿Que los diálogos no son tan Tarantino como en sus había?, también verdadero, lo que no quiere decir que no sean de los mejores que te puedas encontrar hoy en día (es una película de nazis, no se van a poner a hablar de hamburguesas de McDonald...). ¿Que no tiene tanta iconografía como otras había? Vale, pero no es algo malo, lo fácil habría sido poner a Eli Roth con el bate durante todo el film, pero francamente prefiero el resultado final.

Y por si todo esto no fuera suficiente, no queda mas que observar el final, en el que Tarantino se vuelve completamente loco y dirige lo que le da la gana. Es tan brutal y tan valiente, que no puedes evitar revolverte en tu butaca de gusto, de placer (un tanto negro, la verdad), y al final, salir de la sala con la sensación de que acabas de ver una de las mejores películas del año, y de que, ahora sí, Tarantino lo ha vuelto a hacer.

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